jueves, 28 de octubre de 2010

Argüendeando por otros lares...

Queridos lectores,
Meses ha del último post pegado aquí. En el tiempo que ha pasado, no crean que el mundo exterior se ha librado de mis actividades de argüende: he dado talleres y clases, y varios proyectos profesionales me han mantenido alejada del blogcito rosa de mis quereres.

Sin embargo, hoy hay que retomarlo para llamar la atención, una vez más, a los prejuicios morales que tenemos arrastrando desde hace siglos, y que nos hacen tanto daño, que nos impiden ver todo lo demás. "The big picture", dirían los que hablan inglés, se vuelve lo menos importante ante la imperante necesidad de seguir considerando al "otro" como dañino para las vidas de "la gente decente". En este caso, el territorio de la polémica es el blog de mi queridísima y admirada Luza Alvarado - ya la he recomendado antes, pero ahora está on fire posteando todas sus ideas acerca de todos nuestros pendientes para con nuestro querido y doliente México. Les conviene darse una vuelta por allá.

En el caso en particular de su más reciente post, ella imagina una tarea escrita por un niño en un futuro bastante cercano. He aquí el post, y las reacciones que suscitó, incluida la de una servidora. La versión que está en el blog de Luza en este momento ha regresado al redil, futureando la historia de una familia nuclear, porque la idea de dos mujeres criando dos niños dentro de quince años levantó demasiado escozor entre el respetable y se perdió la idea central del texto entre alegatos sobre "lo funcional" y "lo natural", sin dejar a un lado la ya tradicional implicación de que la autora debe ser lesbiana porque su foto así la delata. (En este punto, por favor, si alguien me puede decir qué carajos vio esa mujer en la foto de Luza para decidir con tanta claridad su preferencia sexual, comparta su sabiduría, porque yo por más vueltas que le doy, nomás no lo veo por ningún lado)

Ahora sí, no más preámbulos. Lean la terrible historia de José y... chanchanchannn... ¡sus dos mamás!


José en el año 2025

Hoy hago un ejercicio distinto y muy divertido para imaginar el futuro. Se trata de algo tan sencillo como una tarea escolar escrita por un niño de nueve años que vive en México, en una época cercana al año 2025. Los invito a leerlo con ojos críticos y esperanzados, a buscar los valores importantes para un niño y la sociedad del futuro. Si son curiosos, explorarán los links que incluyo y verán que esto, más que un sueño guajiro o una utopía, es bien posible si así lo queremos. ¡Disfrútenlo!



"Soy José, tengo nueve años. Vivo con mis dos mamás y mi hermana Andrea. Tengo que escribir una tarea para la escuela contando un día normal en mi vida. Ahí va:

Nos levantamos cuando todavía está oscuro y encendemos el generador de energía, porque en la noche hay que apagarlo para ahorrar y que la energía de los paneles solares se aproveche bien. Mientras mamá Liz baña a Andrea, yo salgo con mamá Isabel al patio, donde tenemos un huerto. A mi me toca regar y a mamá Isabel le toca cosechar. Luego preparamos el desayuno y el lunch para la escuela. Usamos lo que compramos en el mercado y también lo que cosechamos. Dice la maestra que si comemos lo que producimos, la tierra se pone contenta y tenemos más energía para jugar. Desayunamos rapidito para que no se nos haga tarde para salir. Mamá Liz y yo nos ponemos el casco y nos vamos en bicicleta, ella me acompaña a la escuela y luego se va a ensayar con su grupo. Mamá Isabel se va con Andrea al kinder. Ellas van en el monorriel porque Andrea es chiquita y todavía no sabe andar en bici.

Lo que más me gusta de la escuela es que hacemos deportes diario. Unas veces jugamos para ver quien gana, otras veces solo jugamos para aprender a hacer equipo. Siempre son equipos mixtos, los niños somos más bruscos y las niñas son gritonas, lo bueno es que el entrenador nos ayuda a convivir para aprender que todos tenemos algo bueno que aportar.
Algunas clases no me gustan porque son de una sola cosa y hay que estar sentado y callado. Pero otras me encantan porque tenemos que construir y reparar aparatos. El taller de Renovación de energía es mi favorito. Nos enseñan a usar las fuerzas invisibles del sol, el viento y el agua para mover grúas a escala, cocinar y encender focos. Siento como si hiciéramos magia. Mi otra clase preferida es la de Sistemas, ahí nos enseñan a resolver retos, solos o en equipo, y usamos lo que cada quien sabe hacer mejor. Ahí descubrí que soy bueno para organizar a mi equipo, y también que se me ocurren inventos para hacer que las cosas vayan más rápido y que todos las podamos usar. El recreo no es una clase, pero si no hubiera sería feo.

En la tarde me regreso a la casa en la bici. En la ciclopista vamos jugando carreritas con mis amigos, yo no soy tan rápido pero soy bueno para esquivar. Cuando llego, mamá Liz y Andrea ya están en la casa y comemos juntos. Mamá Isabel no puede ir a comer, pero nos acompaña desde la pantalla de su trabajo. Ella es muy importante, hace que las empresas sean responsables y justas con la gente y el medio ambiente. Trabaja con gente de todas las edades y es muy inteligente.
Si ayudo a levantar los trastes y a lavarlos, me dejan ver la tele. Me gustan dos programas, la caricatura de Héroes sin fronteras y la serie de Galaxia 3000. Los niños que salen ahí son como yo, pero con poderes. Los héroes superan pruebas bien difíciles con la ayuda de gente normal, y los de Galaxia van descubriendo planetas como la Tierra y de cada uno aprenden inventos para remediar el clima de la Tierra y curarla, pero tienen que vencer a unos enemigos virtuales que destruyen todo con plasma negro.

En la tarde, mamá Liz nos lleva al centro recreativo. Ahí podemos nadar, jugar, ver películas. Dice mamá Liz que cuando existía el dinero en monedas y billetes el centro recreativo era muy caro, pero ahora que todo es con Actioncard todos podemos hacer de todo a cambio de nuestro trabajo. Yo junto más puntos que mis amigos porque me toca ayudar a los abuelos en el vivero vecinal y jugar con ellos en la consola W2050. Con mis puntos me alcanza para entrar a la alberca de surf o escalar el muro. Yo hago todo solo, pero Andrea no. Ella y mamá Liz se van al taller y ayudan a transformar la basura en repuestos para bicicletas, platos, cubiertos y muros para las casas. Y a cambio pueden tomar clases de canto y entomología urbana. Andrea es chiquita pero le tiene miedo a los insectos.

Mamá Isabel nos alcanza en el Centro recreativo cuando sale de trabajar. Si yo no tengo tarea, nos quedamos otro rato y cocinamos la cena con los vecinos o hacemos lecturas actuadas con los abuelos. Si no, nos regresamos a la casa en monoriel, porque como hay nevada todas las noches, nos da frío. al llegar, yo hago la tarea y la mando al correo de la maestra antes de ponerme la piyama. Andrea y mamá Isabel juegan Air-Chess hasta que llega la hora de cenar. Mamá Liz ensaya en su estudio, porque toca Reactable y compone canciones para los viajeros del monorriel.

Mi día termina cuando todos nos ponemos la piyama y jugamos Storyteller en la pantalla de hologramas. Las historias de Andrea siempre tienen luciérnagas mágicas y a mi me gustan las de ecomutantes contra robots. Nos turnamos para no pelearnos, y entre los dos hacemos unas historias loquísimas. Nuestras mamás se ríen y también ponen sus personajes, pero a veces son un poco como ellas y le dan órdenes a los robots, y eso no se vale en la historia, aunque a veces sí."


Si ustedes también imaginan algo positivo para el México del futuro, los invito a compartirlo aquí o aquí. Cuando terminen de hacerlo, les aseguro que estarán sonriendo.

Aquí les dejo un video. No es José, es Luis Enrique González y este es el México que imagina:


Comentarios:

Oscar F Herrera dijo...


No estoy del todo de acuerdo con su "visión de futuro de México": El uso de energías alternativas, la producción para consumo propio y el utilizar medios alternativos de transporte son bienvenidos, sin embargo difiero totalmente en la idea de una Familia "Mujer-Mujer" o "Hombre- Hombre" cuales quiera sea la formula. Creo firmemente que solo una Familia donde un hombre y una mujer se complementan, se respetan, se aman, puede ser la base del crecimiento y sostenimiento de las sociedades actuales y futuras; considero que muchos de los problemas de la sociedad actual radican en las faltas de respeto que los seres humanos nos hemos proferido y expresado por mucho tiempo. Una sociedad basada en el amor, nos debe animar a expresarlo en todo momento a los demás, sean hombres o mujeres, pero entendiendo y asumiendo mi papel y mi condición de sexo… todo lo contrario se vuelve egoísmo y este solo destruye.


Soy Padre de 3 hijas, felizmente casado desde hace 12 años y tengo la tarea irrenunciable de educarlas y llevarlas al camino del bien, la verdad y la libertad; es una tarea difícil, pero nunca renunciare a ella. Es cierto que muchos hombres han demostrado su falta de responsabilidad en esta sociedad moderna y no dejamos que la mujer desarrollara por mucho tiempo todas sus capacidades, le aseguro que muchos hombres hoy admiramos y nos llenan de orgullo y admiración la actividad y responsabilidad que la mujer ha asumido en la actualidad, yo gracias a Dios, tengo una gran mujer que hombro a hombro luchamos cada día por ser mejores; Esta sociedad necesita aprender a vivir con esa Verdad: fuimos hechos iguales, con los mismos derechos y obligaciones, pero con capacidades diferentes que determinan nuestro ser y función. Estoy convencido que como dice Anselm Grün en su libro “Sigue tu Propio camino con la frente alta”, que solo cuando asumimos con valor nuestra propia verdad, nos liberamos…muchos hombres y mujeres nunca dejan de huir a esa propia verdad, huyen de sí mismos toda la vida sin alcanzar nunca la plena felicidad.Seguramente este comentario será muy criticado, sin embargo y con el mismo derecho que usted tiene de publicar sus ideas, las cuales considero muy refrescantes y amenas me animo a expresar las mías.Quedo su servidor…

26 octubre, 2010


pensamientovisible dijo...

Oscar,

Muchas gracias por tu comentario. Aprecio mucho tu sinceridad y el tiempo que te has tomado en escribirlo.Siéntete con toda la libertad de hablar y dar tu punto de vista. Se trata de enriquecer nuestra mirada y creo que tú lo has hecho.

Ahora te cuento un poquito sobre la historia de José. Si te fijas, es un poco ambigua, y esto no es un acto inocente. Cuando digo "dos mamás" dejo abierta la posibilidad a que se trate de una pareja homosexual. Fui maestra durante seis años y vi muchos casos así, donde había dos mamás y eran excelentes madres, compañeras y miembros de su comunidad. (independientemente de lo que ocurriera tras la puerta de su alcoba, cosa que no me incumbe). Si te parece que las dos mamás homosexuales no están dentro de los parámetros de la familia, respeto tu punto de vista y adelante con la vida. Pero te invito a que repasemos el texto una vez más. Si te fijas, cabe la posibilidad de que no sea una pareja homosexual. 

En nuestro país -como en el resto de Latinoamérica- hay muchas madres solteras que, con la ayuda de las abuelas, las primas, las hermanas o las amigas, crían a sus hijos y los sacan adelante. Si echamos ojo a las estadísticas quedará más evidente esta situación. 

En otro orden de cosas, las guerras, los conflictos militares y otras situaciones de crisis social -como tú bien lo has dicho- dejan a muchas madres solas. Quizás faltan estudios profundos que lo documenten, pero lo que he visto y vivido indica que es común que estas madres se unan, por un simple acto de solidaridad femenina, para ayudarse a criar a los hijos. En mi familia materna hay varios casos de tías , abuelas y sobrinas que se ayudan. Y también te comparto el caso de mi tío Luis, quien llegó muy chico de España justo después de la guerra civil. Desde niño tuvo dos mamás (las llamaba mamá Panchín y mamá Tere, las amaba como mamás por igual ), eran dos hermanas que se quedaron viudas y decidieron criar a sus hijos juntas. Primos que crecen como hermanos, mujeres sin hombres que forman una sola familia...

En fin: al igual que tú, me encantaría que para el México del futuro y de siempre las parejas fueran sólidas y asumieran sus compromisos como tú lo has hecho con tu familia. Una vez más te agradezco el comentario y bienvenido a este espacio. Y me encantó la frase de continuar con la frente en alto. ;)



Saludos,Luza

26 octubre, 2010


Daniela dijo...

Hola,

Yo estoy de acuerdo con Oscar y creo que justo uno de los principales problemas que tenemos es que personas como tu Luza quieran justificarse con "ambiguedades". Cada uno puede vivir como quiera y ser responsable de lo que hace, muy seguramente y por lo que veo en tu foto tu seas lesbiana y eso se respeta, pero lo que no, es utilizar los medios para querer dar lecciones o criterios equivocados y falsos. Sería mucho más productivo si todos pusieramos nuestro grano de arena para recomponer a la familia, no para creernos tan modernos o superficiales, que justifiquemos situaciones que por naturaleza no lo son. Yo llevo 30 años en educación y hay una diferencia enorme entre las familias bien compuestas de las que son disfuncionales. Otro aspecto en lo que quiero hacer incapié es que tu artículo con eso de las dos mamás dejó de ser valioso, es como la película que tiene un excelente trama pero que la echan a perder con la escena erótica que no viene al caso, pero se piensa que si no la hay, nadie la va a ver.Te animo a ser mas responsable, que tus buenas ideas brillen por creativas, pero si mezclas sin tener firmes las convicciones confundes y te desacreditas.

27 octubre, 2010


ComandanteA / Alejandra Espino dijo...

Queridos Óscar y Daniela,



Me parece sumamente triste que lo único que les interesara del texto fuera el detalle de que los niños de los que se habla son criados por dos mujeres. Todas las fascinantes posibilidades futuras por las que debemos empezar a trabajar pareciera que no importan ante la ¿"terrible"? ¿"inmoral"? idea de que las familias no van a ser siempre como nos dijeron en la primera mitad del siglo XX - en Occidente- que deberían ser.

Pensar que la noción de familia es algo inamovible desde el principio de los tiempos y sin importar variables culturales o geográficas, sería como seguir manteniendo que la tierra es plana, que las personas morenas no tienen alma o que las mujeres sólo sirven como ornato para los hombres poderosos. La familia, como cualquier estructura creada por los seres humanos muta, evoluciona, se adapta a cambios históricos, culturales, geográficos, etc. Tratar de seguir manteniendo una visión que tiene su origen en los ajustes al catolicismo del concilio de Trento me parece, en el mejor de los casos, anacrónico, y en el peor, peligroso.



Y por otro lado, Daniela, no entiendo qué es lo que ves en la foto de Luza que te haga decir que "muy seguramente sea lesbiana". No alcanzo a percibir qué clase de códigos visuales la harían pertenecer tan definitivamente a ese universo que, por la seguridad con la que te expresas, debe ser monolítico e inalterable. Así que a menos que tengas alguna especie de poder paranormal, tu comentario está totalmente fuera de lugar. Y por favor, no hablemos de naturaleza como si habláramos de dogmas, porque tantito que empecemos a estudiar comportamientos animales y veríamos que todo lo que moral/religiosamente se ve como antinatural es practicado sin complejos por diversas especies. Tu comentario, aparentemente respetuoso, está lleno de prejuicios, que te desacreditan más de lo que la presencia de dos mamás en la historia de Luza, la desacreditan a ella. 

Saludos, y sigue con el buen trabajo, Luza.


Alejandra Espino

28 octubre, 2010